Llegó Bataclán, y las Ramblas de Barcelona, y otra vez se repetieron hábitos periodísticos que ya habíamos visto en el desgraciado caso de Charlie Hebdo. Esmerarda Montero y Carme Ferré-Pavia han publicado en 2017 en la revista Observatorio. OBS un artículo sobre los elementos de espectacularización en los informativos televisivos de ‘prime time’ en este último caso.
El objetivo principal del artículo es analizar si el tratamiento dado por los informativos de la cadena privada española Telecinco a las noticias sobre el atentado al semanario satírico Charlie Hebdo, perpetrado el 7 de enero de 2015 en París, se puede considerar espectacularizado. Este hecho tuvo una transcendencia mundial y aún se localiza poca investigación sobre sus aspectos comunicativos.
A través del análisis de contenido, con creación de categorías múltiples, se han podido obtener datos a lo largo de 14 días de emisión, con un análisis global de un centenar de noticias, que nos aproxima a las técnicas empleadas en la cobertura de este evento, tanto desde el punto de vista de la imagen como del texto verbal. En los resultados, de tipo cuantitativo y cualitativo, se ha podido constatar que hubo un tratamiento espectacularizado, apoyado en la dramatización, el conflicto, la explotación de las imágenes, la exageración y la fragmentación, generando una tematización extrema del caso Charlie Hebdo . Esto llama a la reflexión, no sólo por las técnicas detectadas en la construcción de la noticia, sino por cómo otras informaciones de igual o mayor relevancia quedan de lado, ausentes en el conocimiento del público.
También lleva a plantearse como quizás el caso funcionó como una llamada de atención a las autoridades, que cuando se produjo el atentado de agosto de 2017 en las Ramblas de Barcelona, pidieron a los ciudadanos que no compartieran imágenes de las víctimas.
Es claro que los niveles de aceptación de conductas poco éticas no deben ser los mismos en profesionales que en personas de a pié, pero toda reflexión es poca sobre el respeto a las víctimas, a su privacidad y a la de sus familias.